El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, ha denunciado recientemente lo que describe como una serie de sobrevuelos militares de Estados Unidos cerca de las costas venezolanas, lo que para el gobierno representa una provocación y amenaza a la soberanía nacional.
Lo que ha dicho el gobierno de Venezuela
Durante un balance de operaciones de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), Padrino afirmó que el sistema de defensa aérea del país detectó al menos cinco aviones de combate estadounidenses cerca del mar Caribe, en las inmediaciones de Maiquetía, en el norte del país. Algunos de esos aviones habrían sido del tipo F‑35, con base en Puerto Rico.
El ministro calificó su presencia como una “grosería”, una provocación que atentaría contra la seguridad de la nación. Según Padrino, estos vuelos no son esporádicos: se han intensificado las misiones de inteligencia y exploración estadounidense, pasando de operaciones diurnas a otras efectuadas de noche o en madrugada, y habría además violaciones de normas operacionales, en particular porque no se notifica el plan de vuelo, lo cual, asegura, podría ocasionar accidentes aéreos.
Contexto estratégico y legal
La FANB también ha alertado sobre lo que llama una “campaña perversa”: versiones difundidas en redes sociales que señalan la presencia de helicópteros estadounidenses cerca de islas venezolanas, posiblemente para fabricar incidentes o “falsos positivos” que legitimen acciones más agresivas.
En respuesta a lo que el Gobierno venezolano considera una amenaza, se advierte que podría activarse una movilización nacional, si fuese necesario para defender la soberanía del país. Padrino López señala que Venezuela está alerta y preparada para responder ante cada vuelo, tanto mediante acciones individuales como colectivas.
Además, el decreto de “conmoción exterior”, ya firmado por el presidente Nicolás Maduro, otorga al Ejecutivo poderes especiales para defender los intereses económicos, la producción y la salud del pueblo, entre otras funciones que el gobierno considera clave ante la posibilidad de una agresión extranjera.
Implicaciones diplomáticas
Estos acontecimientos intensifican la tensión entre Venezuela y Estados Unidos, enmarcados en un ambiente ya cargado por acusaciones mutuas: Venezuela acusa a EE. UU. de intervencionismo bajo el pretexto del combate al narcotráfico, mientras que Washington ha denunciado maniobras venezolanas en torno a buques o ejercicios militares que considera desafían sus operaciones en aguas internacionales.
El enfrentamiento diplomático y estratégico incluye alertas sobre riesgos de incidentes, la vigilancia aérea y marítima, y un debate sobre los límites del derecho internacional, las normas relacionadas con espacio aéreo, zonas de interés internacional, y obligaciones de notificación en movimientos militares.
