Las imágenes de una redada del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Portland, Oregón, han generado una ola de indignación y llamado a rendición de cuentas. En los videos, compartidos ampliamente en redes sociales, se observa a agentes federales irrumpir en la casa de Gloria Magaña sin mostrar una orden judicial y con armas desenfundadas.
Según Magaña, los agentes buscaban a una persona que no residía allí. “Gritaban el nombre de Israel, pero nadie en mi casa se llama así”, aseguró a medios locales. Alarmada, pidió a sus hijos encerrarse en su habitación para resguardarse del operativo.
Una redada que terminó en detenciones equivocadas
El evento ocurrió el 15 de octubre en un vecindario del norte de Portland. Mientras los agentes forzaban una de las puertas, la hija de Magaña grabó con su teléfono lo ocurrido. En el video se escuchan las órdenes de los agentes y el llanto de una bebé de tres meses.
A pesar de que posteriormente el ICE reconoció que buscaban a otro individuo, dos miembros de la familia Magaña fueron detenidos: su hijo Napoleón, de 20 años, y su pareja, Arturo García Cabrera. Ambos fueron trasladados a centros de detención migratoria en Washington y Misisipi, respectivamente.
Magaña afirmó que ninguno de los dos tiene antecedentes penales, algo que corroboran los registros federales revisados por medios de comunicación. Sin embargo, los agentes justificaron los arrestos porque ambos se encontraban en el país sin autorización legal.
ICE y el DHS defienden el operativo
Un alto funcionario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que el operativo tenía como objetivo capturar a un individuo con antecedentes criminales, quien habría huido hacia el mismo complejo de apartamentos. “Otros dos ciudadanos extranjeros fueron encontrados en el lugar y puestos bajo custodia”, declaró el funcionario, destacando que ningún agente resultó herido durante la redada.
La agencia ha sido duramente criticada por la falta de precisión en sus operativos. Sin embargo, Marcos Charles, jefe de la división de deportación y operaciones de ICE en Portland, defendió las acciones de los agentes. “Nosotros vigilamos. Si estás en el país sin permiso, te arrestaremos”, dijo.
Charles negó que las operaciones fueran “indiscriminadas” y añadió que los agentes “usan la fuerza necesaria para efectuar un arresto”. “Si la gente lo interpreta como agresión, que así sea”, afirmó en entrevista.
Una ola de protestas “Sin Reyes” en Portland
El incidente se produjo mientras miles de personas salían a las calles en las manifestaciones “Sin Reyes”, una serie de protestas en favor de los derechos de los inmigrantes. Los manifestantes exigieron el fin de las redadas masivas y denunciaron lo que consideran un uso excesivo de la fuerza por parte del ICE.
Durante el fin de semana, agentes federales respondieron con gases lacrimógenos para dispersar a la multitud reunida frente a una instalación de la agencia en Portland, donde durante meses se han mantenido concentraciones de resistencia civil.
Los grupos defensores de los derechos humanos en Oregón aseguran que estas acciones federales reflejan una escalada en el uso de tácticas más agresivas desde la reelección del presidente Donald Trump. Bajo su nueva directiva, se han revertido los límites impuestos durante la Administración Biden que restringían la detención de inmigrantes sin antecedentes criminales.
Tensión política y respuesta local
El alcance de las operaciones migratorias ha generado tensiones entre las autoridades locales y federales. La semana pasada, un tribunal de apelaciones autorizó al Gobierno federal a desplegar tropas de la Guardia Nacional en Portland para proteger las instalaciones de ICE mientras continúa un litigio sobre su despliegue.
En respuesta, líderes comunitarios han comenzado a organizarse para ofrecer apoyo legal y espacios seguros a las familias afectadas. El reverendo Mark Knutson, de la Iglesia Luterana Augustana, colocó un cartel en su templo con la advertencia de que los agentes necesitan permiso judicial para ingresar.
“No vamos a esconder a nadie, pero sí vamos a crear un espacio seguro”, aseguró el pastor. También explicó que su iglesia colabora con abogados y organizaciones locales para ayudar a los inmigrantes a tramitar documentación o asesoría legal.
“ICE no puede entrar aquí… Esto podría generar un impasse si ocurre”, advirtió Knutson, quien dijo rezar para no tener que enfrentarse a esa situación.
Debate nacional sobre las tácticas migratorias
El caso de Gloria Magaña ha reavivado el debate nacional sobre las tácticas del ICE. Mientras el Gobierno insiste en que la prioridad son los inmigrantes con antecedentes criminales, cada vez más voces denuncian que personas sin historial delictivo están siendo detenidas.
Pese a todo, las críticas hacia la política migratoria de la Administración Trump continúan creciendo, especialmente en estados como Oregón, donde las comunidades locales buscan alternativas para proteger los derechos civiles y humanos de sus residentes.