banner app descarga-móvil Nueva News

“No nos protegen”: víctimas de Epstein alzan la voz

víctimas de Epstein alzan la voz
EFE

Las víctimas de Jeffrey Epstein han expresado su indignación contra la administración del presidente Donald Trump y el Departamento de Justicia, acusándolos de priorizar los intereses de figuras poderosas sobre su privacidad y bienestar. En cartas presentadas el 4 de agosto de 2025 en un tribunal de Manhattan, dos sobrevivientes anónimas pidieron que se revisen los documentos del caso Epstein. Quieren que se analicen bien antes de hacerse públicos. Criticaron la falta de transparencia y el manejo político del caso. La controversia incluye transcripciones del gran jurado y más de 100,000 documentos. Esto reaviva el debate sobre la justicia para las víctimas de uno de los mayores escándalos de abuso sexual en EE.UU.

Un clamor por transparencia y respeto

En una carta llena de emoción, una víctima mostró su “desdén, disgusto y miedo” por el manejo del Departamento de Justicia. Dijo que las autoridades han tratado a las sobrevivientes como “peones en una guerra política”. “¿Por qué no son completamente transparentes? ¡Muéstrennos todos los archivos con solo las tachaduras necesarias!”, escribió, exigiendo que se permita a las víctimas sanar. Según Bloomberg News, el FBI eliminó los nombres de Trump y otras figuras de alto perfil de los documentos de Epstein por motivos de privacidad, ya que eran ciudadanos privados durante la investigación inicial en 2006. Esta decisión ha generado sospechas entre las víctimas, quienes sienten que se protege a los poderosos.

Por su parte, la fiscal general Pam Bondi solicitó el 18 de julio a los jueces Richard M. Berman y Paul Engelmayer desclasificar las transcripciones del gran jurado relacionadas con Epstein y Ghislaine Maxwell, condenada a 20 años por complicidad en los abusos. Las víctimas tienen hasta el 5 de agosto para responder a esta petición. Una segunda sobreviviente pidió que un tercero independiente revise los documentos para proteger su identidad, señalando que el Departamento de Justicia parece más interesado en “proteger a hombres ricos” que en garantizar justicia. “Enterarme de que nuestro propio presidente usó a miles de agentes para ocultar su identidad es alucinante”, escribió.

La sombra de la conexión con Trump

La relación de Trump con Epstein, reconocida por el presidente como una amistad que terminó años antes de la muerte del financista en 2019, ha complicado el caso. En julio, el senador Dick Durbin reveló que hasta 1,000 agentes del FBI trabajaron toda la noche revisando más de 100,000 documentos, según una carta enviada a Bondi. La decisión de no divulgar nombres clave, incluyendo el de Trump, ha alimentado acusaciones de encubrimiento. En 2024, un informe del FBI detalló que Epstein operó una red de tráfico sexual que involucró a menores, con víctimas que reportaron abusos entre 1996 y 2018, según el Departamento de Justicia.

Además, la presión para desclasificar los documentos creció tras la decisión inicial de la administración Trump en julio de mantenerlos sellados, lo que provocó críticas de aliados y opositores. Trump, cediendo a la presión, pidió públicamente la divulgación, aunque con redacciones para proteger datos sensibles. Esta postura ha generado división: mientras el Comité Judío Americano apoya la transparencia con salvaguardas, grupos como el Consejo de Relaciones Estadounidenses-Islámicas critican la protección de figuras influyentes, según Reuters.

El caso Epstein y la lucha de las víctimas

Pese a todo, las víctimas siguen exigiendo justicia. Ghislaine Maxwell, quien cumple su condena en una prisión de mínima seguridad en Texas tras ser trasladada desde Tallahassee, se reunió en julio con el fiscal general adjunto Todd Blanche. Maxwell, citada para declarar ante el Congreso, exige inmunidad a cambio de información, según AP. Su testimonio podría revelar más detalles sobre la red de Epstein, que involucró a figuras de élite en EE.UU. y Europa. En 2023, se identificaron 200 víctimas potenciales, según el FBI, aunque solo 40 han testificado públicamente.

Por su parte, las cartas de las víctimas reflejan un dolor persistente. La falta de comunicación del Departamento de Justicia, que declinó hacer comentarios según la portavoz Natalie Baldassarre, ha avivado la frustración. Mientras los tribunales deciden sobre la desclasificación, las sobrevivientes insisten en que su privacidad debe ser prioritaria. “No queremos ser revictimizadas por un sistema que nos ignora”, escribió una de ellas. Con más de 60% de los estadounidenses apoyando la divulgación total, según una encuesta de YouGov de julio, el caso Epstein sigue siendo un recordatorio de las tensiones entre justicia, poder y transparencia en EE.UU.

Compartir: