Un video difundido en redes sociales muestra a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, siendo acosada por un hombre durante un encuentro con simpatizantes en el Zócalo de la Ciudad de México. El incidente, que ocurrió el lunes, generó indignación y abrió un nuevo debate sobre la violencia de género y la seguridad de las mujeres en espacios públicos.
En las imágenes se observa a la mandataria cuando saluda a los asistentes tras un evento oficial, momento en el que un hombre —aparentemente en estado de ebriedad— se acerca a ella e intenta abrazarla de forma insistente, llegando a tocarla sin su consentimiento. Sheinbaum, visiblemente incómoda, mantiene la calma y pide serenidad, mientras agentes de seguridad intervienen para retirarlo del lugar.
Pese a la reacción inmediata de su equipo, el hombre persiste en acercarse a la presidenta, quien logra apartarse mientras continúa atendiendo a otros ciudadanos que aguardaban para saludarla. El video, grabado desde distintos ángulos, se viralizó rápidamente con miles de comentarios que condenaron el acoso.
Reacciones en redes y condena generalizada
El incidente desató una ola de indignación en redes sociales. Políticos, activistas y usuarios exigieron la pronta identificación y detención del responsable. “Ninguna mujer, sin importar su cargo, debería ser víctima de acoso. Este hecho no puede quedar impune”, escribió una defensora de derechos humanos en X.
Otros usuarios subrayaron que el episodio evidencia la vulnerabilidad que enfrentan las mujeres mexicanas, incluso en entornos controlados y con presencia de seguridad. “El acoso es estructural y no discrimina. Si esto sucede con la presidenta del país, imaginen lo que viven millones de mujeres cada día”, comentó una usuaria en redes.
@latinus_us La presidenta Sheinbaum es acosada por un hombre en presunto estado de ebriedad mientras caminaba por el Centro Histórico de la CDMX. #Latinus #InformaciónParaTi ♬ original sound – Latinus
Colectivos feministas también se pronunciaron, reclamando que las instituciones garanticen un entorno seguro para todas las mujeres. “Este caso refuerza la urgencia de políticas efectivas contra la violencia sexual y mecanismos reales de protección”, indicó el colectivo Mujeres en Resistencia.
Además, algunos defensores de derechos humanos llamaron al Gobierno federal a establecer protocolos más estrictos en los eventos públicos, especialmente cuando se realizan encuentros cercanos entre funcionarios y ciudadanos.
El contexto del evento
El incidente se produjo tras la participación de la presidenta en la Reunión Nacional de Universidades e Instituciones Públicas de Educación Superior, celebrada en el Palacio Nacional. Al concluir el encuentro, Sheinbaum decidió acercarse a saludar a un grupo de personas reunidas a las afueras del recinto presidencial.
Ese gesto espontáneo dio lugar al momento en que el hombre se aproximó y la tocó de manera inapropiada. Pese a la incomodidad, la mandataria mantuvo una actitud prudente y continuó interactuando con los presentes una vez que el sujeto fue separado por el personal de seguridad.
Fotografías y videos del momento, difundidos por distintos usuarios de redes, muestran a la presidenta sonriendo de forma tensa mientras intenta continuar con su agenda. “La presidenta tuvo que alejarse del hombre tras sentirse acosada”, señaló un medio local que registró el hecho. Hasta el momento, ni el Gobierno federal ni la oficina presidencial han emitido declaración pública sobre el incidente.
Reacciones de la sociedad civil y exigencias de justicia
Diversas figuras públicas han pedido a las autoridades locales investigar el caso y sancionar al agresor. “Es inaceptable que se vulnere la integridad de la presidenta en un acto público. Este es un mensaje peligroso en un país que enfrenta altos índices de violencia sexual”, manifestó una legisladora del Congreso de la Ciudad de México.
El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) también expresó su solidaridad con Sheinbaum y recordó que este tipo de acciones, aunque aparentemente “mínimas”, constituyen delitos contemplados en el Código Penal. “Es fundamental erradicar la normalización del acoso. Esto no es una falta menor, es una agresión”, afirmó la dependencia en un comunicado.
En tanto, expertos advierten que el caso pone de relieve las brechas en los protocolos de seguridad durante eventos públicos con altos funcionarios. “Si alguien logra tocar a la presidenta, cualquier mujer en el país está aún más expuesta”, resaltó la socióloga Verónica Espinosa, especialista en estudios de género.
Un episodio que reaviva el debate sobre la violencia de género
México registra altos niveles de acoso y agresiones sexuales contra las mujeres. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), más del 70% de las mexicanas ha sufrido alguna forma de violencia sexual o física en espacios públicos o laborales.
El incidente protagonizado por Sheinbaum reaviva la conversación sobre el derecho de las mujeres a ocupar espacios públicos de manera segura, incluso en un país donde la impunidad en estos delitos sigue siendo uno de los principales retos.
Por ahora, se desconoce la identidad del agresor ni si enfrentará cargos por su conducta. Sin embargo, organizaciones feministas insisten en que el caso debe servir como ejemplo para demostrar que “el acoso —venga de quien venga y contra quien sea— merece sanción”.
