Thomas Jacob Sanford, de 40 años y residente de Burton, Michigan, ha sido identificado como el sospechoso del tiroteo masivo en una iglesia mormona de Grand Blanc. El ex marine, quien sirvió en la guerra de Iraq, embistió su camioneta contra el templo, abrió fuego contra los feligreses y provocó un incendio que dejó cuatro muertos y ocho heridos. Sanford murió abatido por la policía en el lugar, mientras las autoridades investigan posibles motivaciones.
Un veterano con trayectoria militar
Sanford se alistó en el Cuerpo de Marines en 2004, justo después de graduarse de la Goodrich High School. Alcanzó el rango de sargento y fue desplegado en la Operación Libertad Iraquí durante varios meses a partir del verano de 2007. Un portavoz militar confirmó que su servicio duró hasta junio de 2008, con su última asignación en Camp Lejeune, Carolina del Norte.
Recibió varias medallas por su desempeño, incluyendo la Medalla de Buena Conducta del Cuerpo de Marines, la Medalla de Campaña de Iraq y la Medalla de Servicio en la Guerra Global contra el Terrorismo. Antes de Iraq, había sido enviado a Japón para entrenamiento. Por lo tanto, su historial refleja un compromiso inicial con el servicio militar, aunque no se conocen detalles sobre su vida post-ejército en ese aspecto.
Vida familiar marcada por desafíos
Sanford estaba casado y era padre de al menos un hijo pequeño. En 2015, su familia lanzó una campaña de GoFundMe para cubrir gastos médicos del niño, diagnosticado con hiperinsulinismo congénito, un raro trastorno genético que causa hipoglucemia severa. El bebé requirió una larga hospitalización y cirugías para extirpar partes del páncreas.
Esta condición impactó financieramente a la familia. Un artículo local de la época reveló que Sanford tomó licencia de su empleo como conductor de camiones para Coca-Cola para apoyar a su hijo. «Nunca des por sentado tener hijos sanos», comentó Sanford en una entrevista. «Pasé cuatro años en los Marines y estuve en Iraq, pero esto ha sido lo más único a lo que me he enfrentado». Además, publicaciones en Facebook de su madre muestran a Sanford como un padre dedicado, compartiendo momentos familiares.
Pasatiempos y presencia en redes sociales
Fuera del ámbito militar y familiar, Sanford era un apasionado de las actividades al aire libre. Fotos en cuentas familiares lo retratan como cazador, posando con ciervos y otras presas en varios trofeos de caza. Estas imágenes, subidas en años recientes, pintan el retrato de un hombre que disfrutaba del campo y la naturaleza.
En redes sociales, también surgió evidencia de sus inclinaciones políticas. Una foto de 2019 lo muestra luciendo una camiseta con el lema «TRUMP 2020». Su esposa y padres compartían contenido pro-Trump con frecuencia, aunque las autoridades no han vinculado estas vistas a la motivación del ataque. Pese a todo, el FBI examina estos perfiles para contextualizar el incidente.
El ataque en la iglesia mormona
El domingo por la mañana, alrededor de las 10:30 a.m., Sanford embistió su Chevy Silverado, adornada con dos banderas estadounidenses, contra las puertas de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Grand Blanc Township. Vestido con pantalones de camuflaje, abrió fuego con un rifle de asalto durante el servicio dominical, que atraía a cientos de feligreses, incluyendo niños.
Testigos relataron que algunos asistentes protegieron a los menores, un acto de heroísmo elogiado por el jefe de policía local, William Renye. Dos víctimas murieron por disparos, y otras dos en el incendio que Sanford provocó con gasolina. Ocho más resultaron heridas, una en condición crítica. El sospechoso fue neutralizado en un tiroteo con agentes en el estacionamiento trasero.
Investigación federal en marcha
El FBI clasificó el suceso como un «acto de violencia dirigida» y desplegó recursos para rastrear posibles cómplices o amenazas adicionales. Registraron la casa de Sanford en el bloque 4100 de East Atherton Road, Burton, usando un robot para inspecciones. También verificaron iglesias cercanas tras llamadas de amenaza de bomba.
Hasta ahora, no se ha establecido un motivo claro. La policía de Grand Blanc confirmó que Sanford actuó solo, pero evitó especulaciones. Reuben Coleman, agente especial interino del FBI en Detroit, urgió a la comunidad a reportar cualquier sospecha. En consecuencia, equipos forenses revisan escombros en busca de evidencias, mientras se entrevista a familiares.
Contexto del incidente en duelo
El tiroteo ocurrió un día después de la muerte de Russell M. Nelson, presidente de la iglesia mormona, a los 101 años. El servicio del domingo era un memorial por Nelson, lo que amplificó el trauma para los fieles. La congregación, parte de una fe con 17 millones de miembros globales, enfrenta ahora una crisis de seguridad.
Autoridades locales y estatales, incluyendo la gobernadora Gretchen Whitmer, han expresado condolencias. Vigilias se organizan en iglesias vecinas, como The River Church, donde unos 100 residentes se reunieron para orar. Mientras tanto, el presidente Donald Trump lo denunció como un «ataque a los cristianos», ordenando al FBI acelerar la pesquisa.
Perfil de un hombre común
Sanford vivía en una zona residencial tranquila, cerca de Flint, marcada por la crisis del agua potable en años pasados. Vecinos lo describen como reservado, sin señales obvias de radicalismo. Un medio local de 2007 lo perfiló como un joven marine orgulloso antes de su despliegue.
Sin embargo, el contraste entre su vida cotidiana y el acto violento genera preguntas. Expertos en salud mental destacan que veteranos de Iraq enfrentan tasas altas de estrés postraumático, aunque no hay diagnóstico confirmado para Sanford. Por lo tanto, la investigación podría revelar más sobre factores subyacentes. La comunidad de Grand Blanc, de unos 8.000 habitantes, busca respuestas en medio del luto.