Donald Trump, presidente de Estados Unidos, ha prometido intensificar los procedimientos para quitar la ciudadanía a inmigrantes naturalizados bajo su administración en 2025. Esta medida, llamada desnaturalización, se centra en personas que cometieron delitos graves. También incluye a quienes hicieron fraudes en sus solicitudes migratorias. Además, abarca a aquellos con vínculos a actividades que amenazan la seguridad nacional.
¿Cuál es el contexto de la desnaturalización?
Durante el primer mandato de Trump, aumentaron los casos de desnaturalización. Este proceso revoca la ciudadanía estadounidense de personas que la obtuvieron por naturalización. Ahora, el gobierno actual quiere acelerar este proceso. Se enfocará en casos legales que la ley permite. Prestarán especial atención a delitos como fraude, crímenes de guerra, terrorismo y otros actos graves.
En una pequeña entrevista, el mandatario resalta que se trata de personas que no deberían estar en su país, llamándoles incluso “criminales” que entraron gracias a las políticas de Biden.
Por esta razón, el republicano declaró que en caso de tener la facultad de hacerlo, los desnacionalizaría definitivamente. Además, al ser cuestionado sobre el período de tiempo en que duraría su pausa al asilo político, se limitó a decir que sería por mucho tiempo, sin dar una fecha exacta.
Criterios para retirar la ciudadanía
Según un memorando del Departamento de Justicia, la desnaturalización se aplicará en casos de personas que hayan mentido o cometido fraude en formularios de inmigración, además de incluir delitos relacionados con seguridad nacional, como espionaje y terrorismo. También se consideran delitos financieros y médicos, como fraudes a programas gubernamentales. La directiva da amplia discrecionalidad a los abogados del Estado para iniciar procesos en situaciones que consideren pertinentes.
¿Cuál es el impacto en la ciudadanía?
Esta política ha generado alarma por el riesgo de abusos, ya que el lenguaje del memorando es vago y abre la puerta a posibles arbitrariedades, incluso en casos que no involucren delitos graves. Además, la propuesta de Trump de quitar la ciudadanía por nacimiento afecta a los hijos de inmigrantes en Estados Unidos. Esto aumenta la incertidumbre sobre el estatus legal de millones de ciudadanos naturalizados.
