banner app descarga-móvil Nueva News

Ola de violencia golpea a Colombia: Trece muertos en un día

Ola de violencia golpea a Colombia
Integrantes de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (DIJIN) inspeccionan un vehículo afectado tras una explosión en inmediaciones de la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez este jueves, en Cali (Colombia). EFE/ Ernesto Guzmán Jr

Colombia vivió una jornada de terror el jueves con dos atentados coordinados que dejaron al menos 13 muertos y más de 20 heridos, sacudiendo a Cali, la tercera ciudad más importante del país, y el municipio de Amalfi en Antioquia. Un camión bomba explotó cerca de la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez en Cali, mientras un helicóptero policial fue derribado en Amalfi, presuntamente por un dron. Estos ataques, atribuidos a disidencias de las FARC y al Clan del Golfo, reavivan las alarmas en regiones marcadas por el narcotráfico y la violencia armada, en un contexto donde el gobierno de Gustavo Petro enfrenta crecientes críticas por su política de seguridad.

Atentado con camión bomba en Cali

En Cali, capital del Valle del Cauca, un camión cargado con explosivos detonó a las 2:50 p.m. del jueves en el barrio de Salomia, cerca de la Escuela Militar de Aviación Marco Fidel Suárez, dejando al menos cinco civiles muertos y 14 heridos, según la Alcaldía de Cali. Imágenes de la escena mostraron vehículos calcinados, vidrios rotos y ciudadanos heridos en una zona concurrida, generando pánico en la ciudad de 2.2 millones de habitantes. El alcalde Alejandro Eder condenó el ataque y anunció una recompensa de 400 millones de pesos por información sobre los responsables, mientras ordenaba militarizar las entradas de la ciudad.

Por ejemplo, un sospechoso, alias “Sebastián”, fue capturado por la comunidad mientras intentaba huir. Según inteligencia policial, el ataque estaría ligado al Frente Jaime Martínez de las disidencias de las FARC, lideradas por alias Iván Mordisco. Este atentado ocurre semanas después de una ola de 24 ataques coordinados en Valle del Cauca y Cauca el 10 de junio, que dejó ocho muertos, incluyendo dos policías, y más de 50 heridos, también atribuidos al Estado Mayor Central (EMC).

Helicóptero derribado en Amalfi

Horas antes, en la vereda El Toro de Amalfi, Antioquia, un helicóptero UH-60 Black Hawk de la Policía Nacional fue derribado mientras apoyaba una operación de erradicación de cultivos de coca. El ataque, presuntamente ejecutado con un dron cargado de explosivos, dejó ocho uniformados muertos y ocho heridos, según el Ministerio de Defensa. El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, calificó el hecho como un “golpe trágico” para las fuerzas de seguridad, activando la red hospitalaria para atender a las víctimas.

Aunque inicialmente el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, señaló al Clan del Golfo, información posterior apuntó al Frente 36 del EMC, bajo el mando de alias Calarcá. En Amalfi, una zona clave para el narcotráfico con 253,000 hectáreas de cultivos de coca en 2023, operan tanto disidencias de las FARC como el Clan del Golfo, según un informe de la ONU.

Respuesta del gobierno de Petro

El presidente Gustavo Petro, desde Valledupar, calificó los atentados como un “día de muerte” y anunció que su gobierno declarará al Clan del Golfo, el EMC y la Segunda Marquetalia como organizaciones terroristas, permitiendo su persecución global. “Estos grupos forman una junta del narcotráfico”, afirmó Petro, quien viajó a Cali con la cúpula militar para un consejo de seguridad. Además, el gobierno evalúa un decreto de conmoción interior, que otorgaría poderes extraordinarios por 90 días para enfrentar la crisis, según Noticias Caracol.

Sin embargo, la estrategia de “paz total” de Petro, que busca negociar con grupos armados, enfrenta críticas. El expresidente Iván Duque y el Partido Centro Democrático acusaron al gobierno de ser permisivo con el ELN y las disidencias, mientras la Defensoría del Pueblo señaló que Amalfi está bajo alerta desde 2022 por la presencia de estos grupos.

Contexto de violencia creciente

Estos atentados reflejan un recrudecimiento de la violencia en Colombia, donde el narcotráfico y la disputa territorial alimentan el conflicto. En enero, enfrentamientos en el Catatumbo dejaron 117 muertos y 60,000 desplazados, según la gobernación de Norte de Santander. La suspensión de diálogos con el ELN y el EMC, que rechazaron el acuerdo de paz de 2016, complica los esfuerzos de pacificación. Mientras tanto, el uso de drones explosivos, que duplicó las víctimas de artefactos en 2025 según el Comité Internacional de la Cruz Roja, evidencia la sofisticación de los ataques.

Pese a todo, las autoridades han intensificado las operaciones. El general Hugo López, comandante de las Fuerzas Militares, anunció el despliegue de artillería y apoyo aéreo en Amalfi, mientras Eder pidió al gobierno nacional mayor apoyo para Cali, una ciudad que no puede enfrentar sola esta amenaza.

Compartir: