La mañana del 5 de noviembre, Nawat Itsaragrisil, director ejecutivo de Miss Universe Tailandia y anfitrión oficial del certamen Miss Universo 2025, reaparició en público de manera inesperada. Su regreso fue marcado por un momento emocional intenso durante la conferencia de prensa previa a la ceremonia de bienvenida. Visiblemente afectado, Nawat subió al estrado donde se encontraban candidatas, periodistas y miembros del equipo organizativo. En cuestión de instantes, el empresario se quebró emocionalmente ante todos los presentes, rompiendo en llanto y deteniendo sus palabras en varias ocasiones para recuperar la compostura.
Entre lágrimas, Nawat ofreció disculpas públicas a todas las concursantes del Miss Universo 2025. Reconoció haber cometido un error y admitió que no imaginaba el alcance y magnitud que tendría el conflicto surgido con la representante mexicana. «Me disculpo con todas, no pensé que esto iba a tener esa magnitud», logró decir entre sus lágrimas. Este momento de vulnerabilidad se convirtió rápidamente en uno de los más comentados del certamen en su edición 2025, resonando fuertemente entre las asistentes y los medios de comunicación.
El enfrentamiento que detonó la crisis
El trasfondo de esta polémica se origina en la ceremonia de imposición de bandas realizada el 4 de noviembre. Durante este evento, Nawat Itsaragrisil confrontó directamente a Fátima Bosch, representante de México, frente a todas las demás delegadas. La tensión surgió a raíz de una votación alternativa que el directivo promovió desde la cuenta oficial de Miss Universe Tailandia. La iniciativa ofrecía una cena privada para diez candidatas seleccionadas mediante votación en redes sociales.
@.diosas_del_mu No lo puedo creér, pero que es esto, me acabo de despertar y me entero de esto… muchos sabíamos que el sr nawat sería un problema para una organización tan seria como lo es el Miss Universe. #missuniverse #missuniverse2025 #fatimabosch #mexico #polemica ♬ sonido original – Diosas del MU
La organización central del certamen desconoció inmediatamente la legitimidad de esa dinámica. Reiteraron que solo son válidas las competencias oficiales, como traje típico, sesión de gala y la ronda de preguntas. Bosch se mostró reacia a participar en la iniciativa promovida por Nawat, lo que incomodó al anfitrión y desembocó en un enfrentamiento directo. «Escuché que no vas a publicar nada sobre Tailandia… ¿es cierto?», cuestionó Nawat ante el grupo de candidatas.
La mexicana intentó esclarecer la situación y descartó que su decisión se debiera a falta de interés o compromiso. Argumentó que había un malentendido respecto a las indicaciones que había recibido. Sin embargo, el tono de la conversación subió rápidamente de intensidad. Nawat insistió con preguntas directas: «¿Vas a seguir nuestras indicaciones o no? ¿Puedes trabajar para promover Tailandia o no? ¿Sí o no?» buscaba una confirmación explícita de Bosch.
La escalada del conflicto
Fátima Bosch mantuvo su posición, accediendo finalmente a las exigencias del directivo aunque manifestó su deseo de defender su propio criterio. «Sí, por supuesto, sí», respondió la mexicana, pero la tensión en el ambiente no disminuyó. La discusión se intensificó cuando Nawat cuestionó al director nacional de México. Lo calificó como una persona de poca inteligencia y lo culpó de obstruir la comunicación con las candidatas.
La candidata respondió de manera directa: «Porque tengo voz, y lo que ha hecho no es correcto. Si tiene un problema…» Para luego agregar con firmeza: «Sí, pero usted no me está respetando como mujer». Sus palabras resonaron con otras concursantes, quienes intervinieron en su respaldo. Las delegadas reclamaron un trato más equitativo hacia todas las participantes en el concurso.
La situación escaló rápidamente hacia las redes sociales, impactando significativamente en la imagen del certamen. Se generó un debate intenso sobre el trato que reciben las candidatas en plataformas internacionales. Muchas voces en redes criticaron el comportamiento de Nawat y demandaron mayor respeto hacia las participantes. El conflicto trascendió los límites de la ceremonia, convirtiéndose en tema de conversación global en cuestión de horas.
La reconciliación pública
Previo a la rueda de prensa, Nawat Itsaragrisil ya había ofrecido una disculpa a través de sus redes sociales. Sin embargo, su aparición pública y su ruptura emocional durante la conferencia de prensa añadieron una nueva dimensión al momento. Su llanto fue percibido por muchos como una muestra de genuina contrición, aunque otros cuestionaron la sinceridad del gesto.
@latinus_us Nawat Itsaragrisil, anfitrión del evento de Miss Universo 2025, se quebró frente al público durante una conferencia de prensa. #Latinus #InformaciónParaTi ♬ original sound – Latinus
A pesar de la conmoción derivada de este episodio, Nawat optó por no apartarse de las actividades oficiales del certamen. Después de la conferencia de prensa, continuó su agenda como anfitrión y líder de la organización. Participó en la ceremonia de bienvenida y otras actividades programadas en Tailandia para el Miss Universo 2025. Su decisión de continuar con sus funciones reflejó determinación de no permitir que el conflicto interrumpiera el desarrollo del concurso.
El incidente ha generado conversaciones importantes sobre la dinámica de poder en competencias de belleza internacionales. Las críticas hacia Nawat se enfocaron en el manejo inapropiado de la situación y el trato desigual hacia las candidatas. Las defensa de Bosch resonó con muchas personas que ven en ella un símbolo de resistencia contra prácticas cuestionables en estos certámenes. El momento quedará registrado en la historia del Miss Universo como un punto de inflexión en las discusiones sobre respeto y equidad.
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