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California podría frenar el nuevo plan político de Trump

California podría frenar el nuevo plan político de Trump
EFE

California se ha posicionado como el principal bastión demócrata frente al plan del presidente Donald Trump para redibujar los mapas electorales y asegurar la ventaja republicana en el Congreso de cara a las elecciones de 2026. Liderados por el gobernador Gavin Newsom, los demócratas del estado buscan contrarrestar los esfuerzos republicanos en Texas y otros estados, en una batalla que podría redefinir el equilibrio político en Washington.

El desafío de la redistribución electoral

El plan de Trump, respaldado por líderes republicanos, busca consolidar escaños en estados clave como Texas, donde los republicanos intentan ganar hasta cinco distritos adicionales en la Cámara de Representantes. En respuesta, más de 50 legisladores demócratas de Texas abandonaron el estado para impedir el quórum necesario para aprobar el nuevo mapa, una táctica que ha intensificado las tensiones políticas. Otros estados, como Ohio y Georgia, también están considerando rediseños similares, rompiendo con la práctica habitual de actualizar los mapas cada década tras el censo.

Por su parte, California, con 52 distritos congresionales, el mayor número en el país, emerge como el campo de batalla clave para los demócratas. Newsom, quien se perfila como un posible candidato presidencial en 2028, ha propuesto convocar elecciones especiales en noviembre para que los votantes aprueben un nuevo mapa electoral. Este movimiento busca contrarrestar los esfuerzos republicanos y proteger la representación demócrata, especialmente en distritos con poblaciones latinas y afroamericanas.

La estrategia de Newsom

El viernes pasado, Newsom prometió “clavar una estaca en el corazón” de la agenda de Trump, criticando los intentos de manipular los distritos para favorecer a los republicanos. Sin embargo, su plan enfrenta un obstáculo: desde 2010, la Comisión Ciudadana de Redistribución de Distritos de California (CCRC), una entidad independiente, tiene la autoridad exclusiva para redibujar los mapas electorales. Newsom está trabajando con la Legislatura estatal para suspender temporalmente la CCRC y presentar un mapa alternativo directamente a los votantes.

“Nos dirigiremos al pueblo de manera transparente y les pediremos que consideren estas nuevas realidades”, declaró Newsom a la prensa. La propuesta, aunque arriesgada, busca aprovechar el fuerte apoyo demócrata en California, donde el partido controla 40 de los 52 escaños federales. Según una encuesta reciente, el 62% de los californianos apoya revisar los mapas para proteger a las comunidades minoritarias, un tema central en el debate.

Un frente demócrata unido

La resistencia de California se ha fortalecido con el apoyo de otros gobernadores demócratas. El viernes, Newsom recibió en Sacramento a los legisladores texanos que huyeron de su estado, proyectando un frente unido contra los republicanos. En Illinois, el gobernador JB Pritzker también se reunió con la delegación texana, calificando su boicot como “un acto de valentía” para proteger a sus electores. “Todos podemos aprender de su estrategia”, afirmó Pritzker. La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, se ha sumado al esfuerzo, prometiendo revisar los mapas de su estado para contrarrestar las tácticas republicanas.

Por otro lado, los republicanos no se han quedado de brazos cruzados. El congresista Kevin Kiley, republicano por California, anunció el lunes una legislación para prohibir los rediseños de distritos a mitad de década en todo el país, lo que anularía cualquier mapa aprobado antes del censo de 2030. La propuesta busca limitar la capacidad de estados demócratas para responder al plan de Trump.

Implicaciones nacionales

El enfrentamiento tiene implicaciones significativas para el control del Congreso, donde los republicanos mantienen una mayoría ajustada. California, con su peso electoral, podría inclinar la balanza si logra implementar un mapa que favorezca a los demócratas. Sin embargo, el plan de Newsom enfrenta desafíos legales y políticos, ya que la CCRC fue creada para evitar manipulaciones partidistas. Organizaciones de derechos civiles han expresado preocupaciones sobre la transparencia del proceso, aunque apoyan proteger la representación de minorías.

Mientras tanto, el conflicto entre California y la administración Trump pone a Newsom en el centro del escenario nacional, consolidando su papel como líder de la resistencia demócrata. A medida que se acercan las elecciones de 2026, la batalla por los mapas electorales promete intensificarse, con consecuencias que podrían moldear el futuro político del país.

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