banner app descarga-móvil Nueva News

US Open: Millonario CEO le roba a niño la gorra del tenista Majchrzak

Millonario CEO le roba a niño la gorra del tenista Majchrzak
EFE

Un incidente en el US Open 2025 ha captado la atención mundial tras volverse viral. Piotr Szczerek, un millonario polaco y CEO de la empresa de pavimentación Drogbruk, fue identificado como el hombre que le arrebató una gorra firmada por el tenista Kamil Majchrzak a un niño llamado Brock durante un partido en Flushing Meadows. La acción desató una ola de críticas en redes sociales, pero Szczerek ha respondido con una disculpa pública, mientras Majchrzak intenta calmar las aguas.

El momento que indignó a los fans

El jueves 28 de agosto, tras su épica victoria en cinco sets contra el noveno cabeza de serie, Karen Khachanov, Kamil Majchrzak celebraba con los aficionados en la cancha 11. Mientras firmaba autógrafos, el tenista polaco se quitó la gorra y la ofreció a Brock, un joven fan en la primera fila. Sin embargo, Szczerek, que estaba junto al niño, interceptó el recuerdo y lo guardó en la bolsa de su esposa, dejando al pequeño visiblemente devastado. “¿Qué haces?”, se escucha decir al niño en el video que se difundió rápidamente.

El clip, grabado por las cámaras de transmisión, provocó indignación inmediata. Los aficionados en redes sociales calificaron el acto de “egoísta” y “vergonzoso”, y algunos incluso lo apodaron “el hombre más odiado de internet”. La furia llevó a una oleada de reseñas negativas contra la empresa de Szczerek, Drogbruk, en plataformas como Yelp y Trustpilot, donde usuarios condenaron su comportamiento.

La disculpa de Piotr Szczerek

En respuesta, Szczerek emitió un comunicado el 1 de septiembre, pidiendo disculpas por lo que calificó como un “grave error”. “Estaba convencido de que la gorra era para mis hijos, que habían pedido autógrafos antes. No fue mi intención quitarle un recuerdo a un niño, pero sé que lo lastimé y decepcioné a los fans”, escribió. Aclaró que ni él ni su familia comentaron en redes sobre el incidente y desmintió supuestas declaraciones en línea, asegurando que no recurrieron a abogados.

Además, Szczerek confirmó que la gorra fue devuelta a Brock y expresó su compromiso de involucrarse más en iniciativas para apoyar a jóvenes atletas. “Este momento de desatención me ha dado una lección de humildad. Solo con acciones puedo reconstruir la confianza perdida”, añadió. Pese a su mea culpa, la opinión pública sigue dividida, con muchos cuestionando la sinceridad de sus palabras.

Majchrzak hace las paces con Brock

Por su parte, Kamil Majchrzak, ranked 76 en el mundo, actuó rápidamente para enmendar la situación. Usando el “poder de internet”, localizó a Brock a través de redes sociales y se reunió con él el sábado 30 de agosto. En un emotivo encuentro, el tenista le regaló una nueva gorra firmada y otros recuerdos. “Hola mundo, ¡junto con Brock te deseamos un gran día!”, escribió en Instagram, compartiendo una foto sonriendo junto al niño.

Majchrzak también intentó suavizar la controversia, sugiriendo que el incidente fue un malentendido. “Obviamente, fue una confusión. Estaba muy cansado y emocionado tras el partido, no me di cuenta de lo que pasó”, explicó a un medio local. Reveló que Szczerek, patrocinador de la federación polaca de tenis, contactó a la madre de Brock para disculparse personalmente.

El impacto del escándalo

El incidente ha opacado parcialmente el impresionante desempeño de Majchrzak en el US Open, donde venció a Khachanov, pero tuvo que retirarse en la tercera ronda contra Leandro Riedi por una lesión muscular. Mientras tanto, la empresa de Szczerek, fundada en 1999 con su esposa Anna, enfrenta una crisis de reputación tras las críticas masivas en línea.

En consecuencia, este episodio ha resaltado el poder de las redes sociales para exponer comportamientos cuestionables y movilizar a la comunidad. Aunque Szczerek y Majchrzak han intentado reparar el daño, el debate sobre la ética y la responsabilidad en eventos deportivos sigue abierto, dejando una marca imborrable en el US Open 2025.

Compartir: