Son Heung-Min se despide entre lágrimas y aplausos del Tottenham tras una década de éxitos. El capitán surcoreano anunció su salida el 2 de agosto en Seúl. Durante un amistoso contra Newcastle United, el estadio Seoul World Cup vibró con emociones. El partido, que terminó 1-1, fue el escenario de un adiós inolvidable. Son, visiblemente conmovido, recibió un pasillo de honor de ambos equipos. Los 64,773 aficionados presentes ovacionaron al ídolo local. Este momento marcó el fin de una era para el club londinense.
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Son llegó al Tottenham en 2015 desde Bayer Leverkusen. Con 173 goles en 454 partidos, se convirtió en una leyenda del club. Su último gran logro fue levantar la Europa League en mayo de 2025. El delantero, de 33 años, expresó su deseo de buscar nuevos retos. Aunque su destino no está confirmado, rumores apuntan a Los Angeles FC en la MLS. La despedida en su país natal fue un momento especial para él.
Entre lágrimas en su hogar
El amistoso contra Newcastle fue más que un partido. Son Heung-Min se despide entre lágrimas frente a su público en Seúl. Desde el arranque, el capitán mostró su calidad habitual. Brennan Johnson adelantó al Tottenham al minuto 4 con un gol asistido por Son. Newcastle empató al 38 con un tanto de Harvey Barnes. El momento cumbre llegó en el minuto 65. Son salió del campo entre aplausos y abrazos de sus compañeros. Incluso los jugadores rivales se unieron al homenaje.
El técnico del Tottenham, Thomas Frank, describió la escena como «hermosa». En el vestuario, las emociones continuaron. Son agradeció a sus compañeros y al club por el apoyo. Los aficionados coreanos corearon su nombre sin parar. Para muchos, fue un cierre perfecto para una carrera brillante. Son dejó un legado imborrable en el Tottenham. Su conexión con Harry Kane marcó una era dorada en la Premier League.
El impacto de Son Heung-Min
Son no solo brilló por sus goles. Su carisma y profesionalismo lo convirtieron en un favorito. En 2022, compartió el Botín de Oro de la Premier League. Su gol en 2019 contra Burnley le valió el Premio Puskás. Además, fue el primer asiático en superar los 100 goles en la Premier. En mayo, como capitán, levantó el primer trofeo del Tottenham en 17 años.
El partido en Seúl tuvo momentos de preocupación. James Maddison salió lesionado en el minuto 80, con problemas en la rodilla. Thomas Frank confirmó que podría perderse la Supercopa de la UEFA. A pesar de esto, el foco estuvo en Son. Su salida del campo fue un espectáculo emotivo. Los jugadores de Newcastle, liderados por Eddie Howe, mostraron respeto al unirse al pasillo. Howe destacó el impacto de Son como uno de los grandes de la Premier.
Proyecciones a futuro
Con Son fuera, el Tottenham enfrenta un nuevo capítulo. El club ya fichó a Mohammed Kudus y Mathys Tel para reforzar el ataque. Thomas Frank busca mantener al equipo competitivo. El próximo desafío será contra Paris Saint-Germain en la Supercopa de la UEFA. Los Spurs necesitan adaptarse sin su capitán. Mientras tanto, Son evalúa su futuro, con la MLS como posible destino. También tiene en mente el Mundial 2026.
La Leagues Cup 2025 no está relacionada con este evento, pero el Tottenham sigue en pretemporada. Los aficionados ya extrañan a su estrella. Son agradeció a los fans por el cariño recibido. Su legado en Londres es indiscutible. La emoción de su despedida en Seúl resonará por años. Los hinchas esperan verlo brillar en su próxima aventura, mientras el Tottenham se prepara para un futuro sin su gran ídolo.
