Las elecciones de este martes dejaron un contundente resultado a favor de los demócratas en varias entidades clave de Estados Unidos. El Partido Demócrata ganó las gobernaciones de Virginia y Nueva Jersey. También tuvo victorias en Pensilvania, Nueva York y California. Esto fue un gran revés para la influencia política del presidente Donald Trump.
En Virginia, Abigail Spanberger hizo historia al convertirse en la primera mujer gobernadora del estado, poniendo fin a cuatro años de gestión republicana. Spanberger, excongresista y exagente de la CIA, derrotó por más de diez puntos a la republicana Winsome Earle-Sears. Su campaña apostó por el control del coste de vida, la igualdad y la protección de empleos federales en una entidad con más de 300,000 funcionarios públicos.
Durante la contienda, la demócrata unió a su rival con la agenda de Trump. Esto ayudó a ganar el voto independiente y a obtener un apoyo progresista sin precedentes. La derrota de Earle-Sears supone un duro golpe para las aspiraciones del expresidente de recuperar influencia en los estados bisagra de la región atlántica.
Sherrill arrasa en Nueva Jersey
En Nueva Jersey, la demócrata Mikie Sherrill también celebró un triunfo abrumador sobre el republicano Jack Ciattarelli. Con casi el 58 % de los votos, Sherrill, excongresista y ex piloto naval, asumirá la gobernación tras una campaña que priorizó la expansión de programas sociales y la distancia ideológica respecto a Trump.
Sherrill insistió en su mensaje de renovación, igualdad de oportunidades y defensa de los servicios públicos. Los videos del candidato republicano apelando a la agenda trumpista no lograron revertir la tendencia demócrata en este estado, donde Phil Murphy, también demócrata, deja el cargo con altos niveles de aprobación.
Tropiezos republicanos en Pensilvania y Nueva York
El martes también trajo una derrota simbólica para Trump en Pensilvania, donde los votantes optaron por mantener la mayoría progresista en el Tribunal Supremo estatal. El bloque liberal, liderado por Christine Donohue, Kevin Dougherty y David Wecht, superó la campaña republicana que llamaba a sancionar la continuidad judicial. Esto conserva el control progresista con un margen de 5‑2, algo especialmente relevante de cara al control de procesos electorales y legales clave en 2026.
En Nueva York, el demócrata Zohran Mamdani confirmó el giro progresista al ganar la alcaldía de la ciudad. Mamdani fue blanco de las críticas de Trump, quien incluso amenazó con retirar fondos federales y, por momentos, lanzó alabanzas estratégicas hacia el exgobernador Andrew Cuomo, su antiguo rival político.
Estos resultados reflejan una coalición democrática reforzada en las principales ciudades del país, mientras el bloque republicano pierde base en enclaves urbanos y suburbanos considerados esenciales en elecciones presidenciales y legislativas.
California aprueba la Propuesta 50 y consolida distritos demócratas
California aportó otra victoria al bloque progresista al aprobar la Propuesta 50, que permitirá el rediseño de sus distritos electorales. La medida, respaldada por el gobernador demócrata Gavin Newsom, apunta a fortalecer la representación demócrata en el Congreso al trasladar escaños hoy ocupados por republicanos. Con estos cambios, el Partido Demócrata podría mantener hasta 48 de los 52 puestos californianos en la Cámara Baja tras las elecciones de 2026, resultando clave para la batalla nacional por el Congreso.
Newsom justificó la Propuesta 50 como una estrategia para contrarrestar las maniobras partidistas de Trump y sus aliados republicanos en otros estados como Texas.
Reacción de Trump y análisis del escenario nacional
Trump reaccionó rápidamente desde Truth Social, culpando de la derrota republicana a su ausencia “en la papeleta” y al prolongado cierre del Gobierno federal, que afecta de forma directa a entidades como Virginia. Sin embargo, expertos electorales ven en la jornada de este martes una erosión de la coalición trumpista, potenciada por el descontento con las medidas económicas, el temor por la inflación y la creciente desigualdad social bajo la actual administración.
En conclusión, la jornada electoral consolidó el avance progresista en estados estratégicos y anticipa un 2026 competitivo, donde los resultados de este martes podrían influir en la estrategia nacional de ambos partidos.
