La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que el Consulado de México en Miami ha entrevistado a 81 ciudadanos mexicanos detenidos en el controvertido centro de detención migratoria Alligator Alcatraz, ubicado en los Everglades de Florida. Este lugar, conocido por su entorno pantanoso y condiciones cuestionadas, ha generado preocupación entre defensores de los derechos humanos.
Apoyo consular en un centro polémico
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que el cónsul general, Rutilio Escandón, visita regularmente el centro para verificar las condiciones de los connacionales y asegurar que reciban el apoyo necesario. La cifra de mexicanos entrevistados creció significativamente, pasando de 31 el 5 de agosto a 81 al 11 de agosto de 2025, según datos oficiales. Sin embargo, la mandataria no aclaró si este número incluye a quienes ya fueron liberados o deportados.
Por lo tanto, el consulado mantiene una comunicación constante con los detenidos. Escandón, exgobernador de Chiapas, se ha comprometido a garantizar que los derechos de los mexicanos sean respetados, ofreciendo asistencia jurídica tanto para quienes buscan acelerar su deportación como para aquellos que prefieren enfrentar un proceso legal en Estados Unidos.
Condiciones bajo escrutinio
Alligator Alcatraz, construido en un antiguo aeropuerto en los Everglades, ha sido criticado por organizaciones de derechos humanos debido a las duras condiciones reportadas por algunos detenidos. Informes señalan problemas como falta de higiene, alimentación insuficiente y dificultades para comunicarse con familiares o abogados. A pesar de esto, Sheinbaum destacó que, hasta el momento, no hay reportes oficiales de violaciones a los derechos humanos en el centro.
Pese a todo, la presidenta expresó su rechazo a este tipo de instalaciones. “Evidentemente, no estamos de acuerdo con este tipo de lugares de reclusión”, afirmó, señalando que se trata de un centro estatal gestionado por Florida, no por el gobierno federal de Estados Unidos. En algunos casos, los migrantes son trasladados a centros federales antes de ser deportados, siempre que no haya un juicio en curso.
Esfuerzos diplomáticos para reducir el tiempo de detención
El gobierno mexicano trabaja a nivel diplomático para minimizar el tiempo que sus ciudadanos permanecen en Alligator Alcatraz. Sheinbaum subrayó que el consulado ofrece apoyo legal para agilizar procesos, ya sea para quienes desean regresar a México o para aquellos que optan por un juicio en EE.UU. Esta postura refleja el compromiso de México con la defensa de los derechos de sus ciudadanos en el extranjero, especialmente en un contexto de políticas migratorias más estrictas bajo la administración del presidente Donald Trump.
Además, la rápida construcción del centro, que se levantó en solo una semana, ha generado críticas por su diseño y ubicación. Con capacidad para albergar hasta 5,000 personas, Alligator Alcatraz es parte de las iniciativas del gobernador de Florida, Ron DeSantis, para reforzar las deportaciones. Desde su apertura en junio de 2025, el centro ha deportado a cientos de migrantes, según informes locales.
Un contexto migratorio complejo
La detención de los 81 mexicanos se enmarca en un aumento del 49% en las aprehensiones por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) desde que Trump asumió la presidencia en enero de 2025. Actualmente, más de 55,000 migrantes están bajo custodia de ICE en diversos centros, incluyendo instalaciones estatales como Alligator Alcatraz. Este incremento refleja las políticas migratorias más duras implementadas en el segundo mandato de Trump.
En consecuencia, México ha intensificado sus esfuerzos consulares para proteger a sus ciudadanos. La Secretaría de Relaciones Exteriores ha enfatizado la importancia de garantizar un trato digno, independientemente de la situación legal de los detenidos. Mientras tanto, organizaciones de derechos humanos continúan exigiendo transparencia sobre las condiciones en Alligator Alcatraz y otros centros similares.
